No se trata solo de vender camisetas por venderlas, sino de ofrecer las mejores camisetas del mundo, las tuyas, las de tu negocio. Entre estos dos escenarios hay muchos otros, como los que se manifiestan en la violencia en los estadios, en la figura de la tribu como horda que arrasa una ciudad con el resentimiento, el rencor, la rabia del caído, del golpeado.